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En efecto, el fútbol, a veces, es caprichoso y te castiga en los errores. También es cierto que, los nuestros, este sábado, lo han sufrido con extrema crueldad. En esa línea, encajar un gol a los 50 segundos de partido, te lastra para el resto, pero nuestros futbolistas, muy bien dirigidos desde el banquillo por Becker, y con el coraje y la calidad sobre el césped de Nsue, Balboa, Ganet, Pepín y el resto, como Rui, en el eje de la zaga, se sobrepusieron a esa mazazo inicial, y le quitaron el balón a los senegaleses, con combinaciones de mérito, con velocidad, aunque eso sí, sin remate.

Ese primer revés, tuvo continuación con el tercer gol, fruto de rechaces, con el tiempo cumplido, ya el minuto 91. Salvo esas dos espinas, al principio y al final, los nuestros fueron mejores, y dominaron, para sorpresa de todos los que no conocen como entrena y como se entrega esta selección, con Becker a la cabeza, tanto los que juegan, como los que no. ¡¡¡ENHORABUENA POR EL ORGULLO, NZALANG!!!

Conviene recordar que Senegal tiene una selección plagada de jugadores de las mejores ligas europeas (inglesa, alemana, francesa, etc..), y en cuanto hay un despiste, por pequeño que sea, te castigan con máxima dureza. Eso ocurrió este sábado. Ningún otro análisis es posible. Y debemos sentirnos muy orgullosos del trabajo realizado, que solo es deslucido por el resultado con un gol en el arranque, y otro en tiempo añadido. En el resto, nada de nada de Senegal, que tenía miedo y estaba atónito con lo que estaba haciendo el joven equipo de Guinea Ecuatorial.

Los de Becker les quitaron el balón, jugaron con corazón y determinación. Se dejaron la piel, en un campo irregular, y lo dieron todo por la camiseta y el escudo. Mucho orgullo para representar a toda Guinea Ecuatorial, y honrar a los más de 400 seguidores ecuatoguineanos que no cesaron ni un instante en animar a nuestros futbolistas, y que hicieron frente al resto de los 35.000 senegaleses. El reconocimiento de nuestros jugadores a su labor desde la grada tuvo, también, recompensa, cuándo a la salida del autobús del equipo, los aficionados ecuatoguineanos hicieron pasillo y aplaudieron a nuestra expedición.

Guinea Ecuatorial, con la presidencia de la FEGUIFUT de Andrés Jorge Mbomio, con la dirección técnica de Esteban Becker, y con unos jugadores tremendamente comprometidos, se han ganado el respeto del fútbol continental y mundial. Los comentarios, en el mismo Estadio Leopold Sendor, o los que han llegado de todo África, o Europa o América, alaban la apuesta del fútbol bien jugado, del trabajo táctico espectacular y, también, de la crueldad del marcador. Incluso, el propio seleccionador de Senegal, reconoció en rueda de prensa, y personalmente, a Becker, la excelente labor del Nzalang, y lo abultado del marcador que no refleja, en absoluto, lo ocurrido en campo de juego.

Todos tenemos en la retina las oportunidades desperdiciadas por Pepín, o Nsue, o Balboa, pero el fútbol es esto, y debemos asumirlo. Porque los nuestros tuvieron más el balón, y dispararon a puerta más que Senegal. Curioso. La diferencia es que los senegaleses, marcaron tres de las cuatro oportunidades que tuvieron, y los nuestros no. Nada más y nada menos. Así de duro y cruel.

Guinea Ecuatorial está en crecimiento, y debemos apoyar al máximo a nuestro Presidente y Cuerpo Técnico porque ellos han hecho historia, y con paciencia, los resultados llegarán. Estamos en el buen camino, el que muestra la calidad, el trabajo, y el amor por unos colores, que son los del Nzalang.

• SENEGAL 3 - GUINEA ECUATORIAL 0
1-0. Minuto 1. Fox.
2-0. Minuto 73. Fox.
3-0. Minuto 91. Kara.

Texto y fotos: Dpto. Comunicación FEGUIFUT